Este fin de semana se ha celebrado un acto de Vox en el que se han mostrado mensajes de apoyo al partido por parte de líderes como Trump, Meloni o Viktor Orban. Ha quedado claro que Vox es un partido contrario a la globalización, marcadamente conservador en el terreno moral, contrario a la inmigración ilegal, a la ideología de género y a la descentralización descontrolada que representa el Estado de las Autonomías. Todo eso creo que era bien conocido y puede ser objeto de debate. También se sabía que Vox era contrario a las políticas de revisionismo histórico emprendidas por la izquierda, pero personalmente pensaba que ello no suponía tomar partido por uno de los bandos de la Guerra Civil. La presencia en su acto de un grupo de música cantando “Vamos a volver al 36” me ha dejado las cosas muy claras e imagino que a otras personas también. ¿Esa es la respuesta a la discordia puesta en marcha por la izquierda? Desde luego que no. Algunos progres pensarán que esa canción guerracivilista es una muestra del “discurso del odio” e igual piden que actúe la fiscalía. Sería un error. El despliegue de la libertad ha servido para conocer mucho mejor cuál es la ideología de Vox y poder votar con conocimiento de causa.
P.D. He visto la interpretación y las letras de la canción y debo rectificar: no es un alegato guerracivilista, sino una crítica con muy poco arte de los tópicos progres. De todas formas, la idea de esta entrada me sigue pareciendo válida. Me parece muy bien que Vox y cualquier partido exponga libremente sus puntos de vista. Cuanto más claros, mejor.
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