viernes, 27 de junio de 2008

Cuando no consumir se interpreta como ahorro

Miguel Sebastián, Ministro de Industria, justifica la subida de la tarifa eléctrica afirmando que servirá para fomentar el ahorro, y que, además, al emitir menos CO2, será una medida beneficiosa para el planeta. Supongo que algo tenía que decir, pero es un poco cansino que nos tomen por gilipollas. Si hay que subirla, díganlo con claridad y expliquen las verdaderas razones. Pero no nos hagan comulgar con ruedas de molino. ¿Es admisible esta equiparación del no-consumo con el ahorro? El ahorrar implica una decisión voluntaria y meditada de no consumir y reservarse el dinero para hacer frente a necesidades futuras. Ante el coste de la electricidad muchos españoles no podrán permitirse conectar, por ejemplo, el aire acondicionado y tendrán que asarse sudando la gota gorda este verano. Eso, señor Sebastián, no es ahorrar, sino padecer las consecuencias de no tener dinero para pagar algo. Y cuando uno no tiene dinero para pagar es cuando empieza a sentir que es pobre, lo cual es muy digno, pero a nadie le gusta. No se mofen de nosotros. Los españoles somos más pobres cada día. Díganlo abiertamente y no nos tomen por idiotas.

miércoles, 18 de junio de 2008

La crisis de las pensiones

¡Por supuesto que el sistema de pensiones no tiene futuro! Es de las pocas cosas que se pueden afirmar con rotundidad porque es una verdad matemática. Si la gente cada vez vive más años y se sigue jubilando a los 65, y a ello añadimos que cada vez nacen menos niños, pues la cosa está clara: o llenamos el país de inmigrantes y confiamos en un crecimiento económico sostenido alto a lo largo de los años, o retrasamos la edad de jubilación. Hay que mentalizarse de que no hay otra alternativa. Mientras el sistema no varíe, ya tardan en ir a contratarse un plan de pensiones.

martes, 17 de junio de 2008

¡Cómo trata el PP a los suyos!

Dejando al margen el fondo del asunto, la reacción de los políticos del PP a la condena de Jiménez Losantos permite ver cómo trata el PP a los suyos. Gustará más o menos, pero en estos cuatro años de oposición, el PP se ha mantenido en buena medida gracias a la COPE y especialmente a Jiménez Losantos. Ahora le pagan tratándole como un apestado. ¿Se imaginan a los socialistas hacer algo parecido con sus periodistas? Lo mismo que sucede con Jiménez Losantos sucede en otros muchos ámbitos. El PP casi nunca trata bien a quienes le han apoyado. Entiéndanme bien, no me parecen nada bien las políticas sectarias, pero la realidad es que existen, y en este terreno el PP actúa de pena.

Rajoy y las sentencias judiciales

Vi la entrevista que ayer le hicieron a Rajoy en Antena 3. No hubo sorpresas y no tengo nada más que decir sobre Rajoy como líder del PP. Es un cadáver político que sus correligionarios se resisten a enterrar a base de ponerse Vicks Vaporub en el bigote. Pese a que no puedo decir que me sorprenda, creo merece un comentario su respuesta a la sentencia que condena a Jiménez Losantos. Rajoy nos salió con que las decisiones judiciales no se comentan, se acatan. Me parece impresentable que esto lo diga alguien que aspira a gobernar, pero que encima esta persona sea jurista ya es la leche. Semejante afirmación supone un desconocimiento absoluto de la esencia del poder judicial. No estamos ante un poder cuya legitimación social se base tanto en la fuerza ejecutiva de sus decisiones como en la fundamentación de las mismas. El poder judicial, pese a tener potestas, sobre todo es autoritas. ¿Qué es eso de que las sentencias judiciales simplemente se acatan? ¡Y un cuerno! Se acatan, pero es necesario examinarlas a fondo para ver si son un instrumento de justicia o más bien de arbitrariedad. De lo contrario, qué sería el Estado de Derecho. Rajoy ha querido salir del asunto gallegueando, como es su costumbre, y ha dicho una soberana estupidez.

viernes, 13 de junio de 2008

¿Viajará alguien a la Expo de Zaragoza?

Me pregunto quién va a viajar a Zaragoza para visitar la Expo. Mucho me temo que va a ser un fiasco monumental, pese a que no dudo de que merezca la pena. La gente no tiene dinero para pagarse unas vacaciones y dudo mucho del atractivo que para las grandes masas tiene el turismo cultural. A fin de cuentas eso es una Expo, turismo cultural para el gran público. Lo curioso del caso es que contamos con la experiencia de la Expo de Sevilla, que tampoco resultó rentable celebrándose en un año mucho más propicio como 1992 con las Olimpiadas de Barcelona que podían atraer a muchos visitantes extranjeros.

miércoles, 11 de junio de 2008

A la deriva

La sensación de que España marcha a la deriva aumenta cada día. El gobierno dirigido por Zetapé es incapaz de marcar un rumbo y de adoptar medidas para evitar el brutal deterioro de nuestra economía y, como consecuencia de ello, de nuestro nivel de vida. La inflación sigue disparada y los españoles no vemos cómo vamos a salir de esta crisis. Además, aunque lo sospechábamos, ahora sabemos que el Estado sólo puede disponer del 22% del gasto público. El resto corresponde a las autonomías. Este dato pone de relieve que el Estado central cada vez está más limitado y que el margen de actuación del gobierno es menor. La unidad de España cada vez es más precaria y urge rectificar cuanto antes el modelo constitucional del 78 que nos lleva a la desintegración.

lunes, 9 de junio de 2008

Sobre la huelga de transportistas

Los transportistas protestan porque el precio del gasoil impide que obtengan un cierto margen de beneficio en su actividad. Ha llegado un momento en que los costes son mayores que los ingresos, es decir, trabajar significa perder dinero. Me pregunto si no podrían trasladar dichos costes al consumidor. Supongo que sí, pero probablemente habrán cerrado contratos hace tiempo y se encuentran con la imposibilidad legal de revisar lo acordado. La posible revisión de los acuerdos en función del precio del combustible parece ser una de sus reivindicaciones. Veo factible su solución, incluso sin que el gobierno intervenga. Sus contratos podrían incluir una cláusula que contemplara la variación en el coste del gasoil, o, en caso de que no fuera posible, siempre podrían inflar sus tarifas previendo una subida. Deduzco, pues, que debe haber algo más. Los transportistas saben que no basta con poder trasladar sus costes al consumidor porque éste terminará por no contratar, así que lo que buscan es pelear por asegurar la bajada del gasoil, la principal fuente de costes en el desempeño de su actividad. Otro tanto pasa con los pescadores: si el pescado sube de precio se encontrarán con que el consumidor dejará de comprar pescado y su negocio se hundirá. Pretenden, pues, colocar su producto a un precio razonable para obtener beneficios, y para ello deben controlar los costes. Bien, ¿y es factible lo que piden? En mi opinión, es factible si el gobierno dejara de gravar los combustibles, pero imagino que los ingresos del Estado disminuirían considerablemente por lo que no parece una alternativa válida.

Creo que el problema no tiene solución a corto plazo. Es evidente que España sigue sin tener una política energética basada en cuatro principios u objetivos esenciales: reducir nuestra dependencia energética, contribuir a la protección del medioambiente, garantizar el suministro para el desarrollo de nuestra economía y modificar las fuentes de ingresos públicos para rebajar el porcentaje que proviene de la fiscalidad de los combustibles. No tengo una fórmula mágica para determinar qué medidas podrían habernos permitido alcanzar estos objetivos, pero me parece que España debería haberse propuesto ser un país pionero en el desarrollo de energías alternativas, y también me parece de cajón que España debía haber apostado por la energía nuclear más avanzada. No lo hemos hecho así y nuevamente volvemos a ver cómo el precio del petróleo nos desestabiliza sin que tengamos margen de maniobra. Es verdaderamente asombrosa la incapacidad de nuestros políticos, exponente del nivel de la sociedad española.

jueves, 5 de junio de 2008

Lo más importante, la consolidación de Rosa Díez

No es la primera vez que en este blog muestro mis simpatías hacia el partido de Rosa Díez, pero es que cada día que pasa me parece más importante. Estamos ante un partido de izquierda con vocación nacional, entendida no en clave de rancio nacionalismo españolista, sino basada en unos valores políticos recogidos en la Constitución y cada vez más preteridos en la praxis política, a saber, la igualdad real de derechos entre todos los españoles y el papel central del Estado como vertebrador y garante de la misma, todo lo cual no está reñido, ni mucho menos, con un sentimiento de orgullo por el hecho de ser españoles. Si el partido de Rosa Díez se fortalece se habrá logrado que la izquierda encuentre un referente ideológico en la lucha contra el nacionalismo, lógico por otra parte, pero del que había carecido desde la Transición. Desde luego, puede contar con mi apoyo. Esta vez no lo dudo.

martes, 3 de junio de 2008

En plena crisis

...y Solbes sigue descojonándose en nuestra cara. Nos dice que el dato del aumento de paro en mayo no es espectacular porque fue la mitad del registrado en abril. ¡Qué cara tiene el tío! Algunos aún nos acordamos de cuando era ministro en la época de Felipe González. Tuvo que llegar el gobierno del PP para poner orden. Con su cachaza algunos se han confundido con Solbes. Ya les dije que, pese a que ganó el debate a Pizarro, no dijo la verdad. Pizarro tenía toda la razón, y precisamente por ello resultaba tan frustrante ver que era incapaz de ganar la pelea dialéctica. Hace tiempo que en este blog escribí que se trataba de una crisis importante, no de una simple desaceleración. Saldremos de ella, pero no sin cambiar sustancialmente nuestra forma de vida. Pensemos, por ejemplo, en los precios de los combustibles. Si alguno cree que volverán a bajar a los niveles de hace un año, va listo. Pienso en todas esas familias que se han ido a vivir fuera de las ciudades, tienen más de un vehículo y pagan una hipoteca alta. ¿Van a poder aguantar? Se avecinan tiempos duros y no hay líderes políticos de altura. Mal asunto.