sábado, 13 de octubre de 2007

Con la vista puesta en el Tribunal Constitucional

La principal amenaza para nuestro sistema constitucional no es ni el plan Ibarretxe ni el Estatuto catalán. Uno y otro torpedean la Constitución, son incompatibles con el modelo del 78, pero podrían ser fácilmente rechazados. Muchísimo más grave es lo que está sucediendo en el Tribunal Constitucional. Decididamente los partidos políticos, especialmente el PSOE, en una demostración de irresponsabilidad de consecuencias impredecibles, están injiriengo en la institución más importante. Mientras quede indemne el Tribunal Constitucional pervivirá la esperanza de que los desmanes de los nacionalistas y las felonías del insensato orate monclovita resulten conjuradas. Si cae el Tribunal Constitucional, es decir, si pierde su autoridad como consecuencia de ser percibido como un juguete en manos de los políticos, todo estará irremisiblemente perdido y habrá que comenzar una nueva etapa.

No hay comentarios: