miércoles, 18 de diciembre de 2013

Cadore 33

Escuché este nuevo disco de Sergio Dalma mientras regresaba en coche desde Valencia y quedé impresionado. Magníficas canciones para un gran cantante.

jueves, 12 de diciembre de 2013

Las preguntas de la consulta catalana

Todo el mundo puede entender qué implica ser un Estado independiente, pero nadie puede tener claro qué consecuencias tendría para Cataluña y para el resto de España esa condición de Estado “no independiente” que permite la pregunta que se pretende formular. ¿Qué sería Cataluña en ese caso?, ¿un Estado federado dentro de una España federal?, ¿un Estado libre asociado?, porque Estado, lo que se dice Estado, suele identificarse con una organización que se atribuye el monopolio de la violencia legítima en su territorio, un monopolio que por consiguiente presupone la independencia.

Dice Mas que es una pregunta clara (más bien querrá decir que claro que es una pregunta), y que ha sido consensuada. En ese consenso está la clave para entender el bodrio. CiU ha insistido de manera recurrente en que Cataluña necesita “estructuras de Estado”. Su anhelo es una soberanía compartida entre Cataluña y el resto de España, y un estatus de Estado libre asociado. En definitiva, lo previsto en el plan Ibarretxe, es decir una independencia libre de las cargas que comporta la independencia. Así se explica la primera pregunta, que es fiel reflejo del independentismo sin independencia que caracteriza a CiU. Y luego viene la pregunta -esta vez muy clara- de ERC “¿quiere usted que ese Estado sea independiente?”, que queda parcialmente desvirtuada al no saber qué comporta el Estado “no independiente”. Se han superado a sí mismos. Semejante ejercicio de ilusionismo dejará perpleja a la comunidad internacional, sobre todo a países como Canadá, que para este tipo de consultas exige claridad, pero de la de verdad, y no preguntas de la señorita pepis. Si tanto costaba preguntar directamente “¿Desea que Cataluña sea un Estado independiente?” es porque realmente CiU sabe cuáles son las consecuencias de la independencia y no desea afrontarlas.

Imagino lo que vendrá a partir de ahora. Recurso al TC y prohibición de la consulta, que con grandes protestas acatará la Generalitat para acto seguido convocar unas elecciones que supondrán la investidura de un presidente de la Generalitat de ERC que realizará una declaración unilateral de independencia apoyada en una resolución del parlament de Catalunya. A partir de ahí se puede especular. Un colega me decía mientras almorzábamos que no se utilizará la violencia y Cataluña se independizará, que además es lo que él considera más adecuado, pues es una cuestión que a su juicio no merece una sola gota de sangre. Yo creo que la respuesta del Gobierno puede estar condicionada por el resultado de esas elecciones, pero lo más probable es que no tenga más remedio que suspender la autonomía y utilizar las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, o incluso el ejército para hacer cumplir la Constitución. 

miércoles, 11 de diciembre de 2013

A propósito de la excarcelación de Ricart

Miguel Ricart, uno de los asesinos de las niñas de Alcacer, fue condenado por unos crímenes cometidos hace veintiún años cuyo recuerdo todavía nos estremece. Parecía destinado a permanecer en prisión treinta años, pero la sentencia del Tribunal Europeo de Derechos Humanos, que ha considerado que la aplicación retroactiva de la “doctrina Parot” efectuada por el Tribunal Supremo viola el art. 7 del Convenio Europeo de Derechos Humanos, ha supuesto su excarcelación. No estamos ante un caso como el de Bolinaga, cuyo cáncer terminal se esgrimió para dejarlo en libertad y sigue vivito y coleando más de un año después. Ricart ha cumplido su condena conforme a derecho. Pero es verdad, los ciudadanos somos muy libres de seguir pensando que, aunque haya cumplido su condena, Ricart sigue siendo un asesino. Podemos, si así lo deseamos, negarle la entrada en nuestro bar, cerrarle la puerta del taxi, decirle que nuestro hotel no tiene habitaciones para él, no darle empleo, mirarle con odio si lo reconocemos, y mil perrerías más para que abandone España y, si fuera posible, este mundo. Nada nos impide estigmatizarlo de por vida haciéndole sentir nuestro rechazo para prolongar su castigo. Por su parte, los familiares de las niñas pueden negarse a perdonarle. El derecho no puede impedir el odio (salvo supuestos extremos contemplados como delito en el Código Penal), el desprecio y, por tanto, ninguno de los comportamientos citados. ¿Pero es justo tratar así a Ricart, aunque haya cometido terribles crímenes?

Cuando el delincuente cumple la pena establecida por la sociedad no se hace acreedor a ningún tipo de perdón. Ese cumplimiento por sí mismo no lo hace merecedor de ninguna consideración especial, ni le protege, como antes decía, del odio y del desprecio. Podría pensarse que se limita a saldar la deuda que tenía contraída con la sociedad en la medida establecida por la propia sociedad, pero ni siquiera se puede trazar una analogía completa entre el cumplimiento de una pena de cárcel por crímenes brutales y el pago de una deuda, pues una deuda puede tener su origen en acciones lícitas, que dejen fuera de lugar cualquier valoración moral del deudor; e incluso si la deuda tuviera su origen en un comportamiento ilícito, en muchos casos tampoco estaría justificada esa indagación moral (como, por ejemplo, la deuda generada por una multa de tráfico). En la mayoría de casos, cuando el deudor salda una deuda está justificado que se le deje tranquilo. Esto es precisamente lo que parece que no puede admitirse en el caso de crímenes brutales como el de las niñas de Alcacer. ¿Cómo ignorar que un “monstruo” anda suelto? ¿No es absurdo pretender que la gente cierre los ojos ante algo así? A Ricart debería bastarle con estar libre, que no nos pida más. Esa sería la principal prueba de respeto, su libertad. ¿Qué opinan? El asunto es delicado. Les daré mi opinión.

De entrada me parece dudoso que la persecución y la información constante sobre la localización de Ricart no viole algún derecho fundamental. Dejando esto al margen, considero un espectáculo bochornoso ver a un periodista mendigarle unas declaraciones, o dar cuenta de todos sus movimientos hasta el detalle de referir si ha pasado la noche en las vías del tren de cierta localidad. Desde luego si Ricart tuviera un cierto afán por reinsertarse y enmendar los errores que cometió en su juventud se dará cuenta de que eso va a ser imposible. Sí, podemos odiar y despreciar a Ricart y a cualquier criminal, por mucho que haya cumplido su condena, pero al hacer eso nos convertimos en una sociedad incapaz de darle la posibilidad de redimirse. Y una sociedad así no me gusta nada. Se puede considerar que ciertos delincuentes no admiten reinserción y está justificado que la sociedad se proteja de ellos. Ahora bien, más allá de estos casos soy contrario a la cadena perpetua. Penas severas para delitos graves sí, pero debe permanecer abierta la posibilidad de reinserción. Por tanto, fijemos la "deuda" que genera el delito, pero luego respetémosla no ofreciendo espectáculos de persecución y acoso a quien ha cumplido su condena. Por otra parte, pienso que no se gana nada despreciando u odiando, pero allá cada cual con su conciencia. Alguno me objetará que quizá no diría lo mismo si Ricart se instalara en mi barrio, y mucho menos si mi hija hubiera sido una de sus víctimas. Es verdad, no me haría gracia tener a Ricart de vecino, pero ni organizaría una estrategia para hacerle la vida imposible con el fin de que hiciera las maletas, ni participaría en algo así. Antes me iría yo. Y en cuanto a que no diría lo mismo siendo víctima, con las reservas que implica tener que imaginar una situación tan dura, con sinceridad creo que si el asesino de mi hija viniera a mí, se mostrara sinceramente arrepentido y me pidiera perdón, le perdonaría. Nada más autodestructivo que vivir con odio.

miércoles, 4 de diciembre de 2013

"Cuaderno de un esquizofrénico"

En la película "Atrápame", el padre del protagonista, al recibir un premio, toma la palabra y pronuncia un breve discurso: "Dos ratoncitos cayeron en un cubo de nata; el primer ratón enseguida se rindió y se ahogó, el segundo ratón decidió pelear, y se esforzó tanto que finalmente transformó la nata en mantequilla y consiguió escapar". No sé si alguno de los seguidores de este blog habrá tenido curiosidad por bucear en "Cuaderno de un esquizofrénico", el blog de mi amigo Óscar referenciado en este blog. Si es así, año tras año, día tras día, habrán podido seguir su lucha, los momentos difíciles, incluso al borde de la tragedia, y los días en que tímidamente salía el sol. Hoy recuerdo los tiempos en que le animaba a escribir un blog, y me siento feliz al ver que la trayectoria que en él se refleja se asemeja a la de ese ratón que de tanto pelear acabó transformando la nata en mantequilla. 

(Felicidades en tu 44 cumpleaños)

jueves, 7 de noviembre de 2013

El cierre de RTVV

Con recursos suficientes para sanidad y educación, casi todo el mundo considerará positivo contar con una radiotelevisión pública (al margen de si la gestión es privada) valenciana que preste atención prioritaria a noticias, eventos y tradiciones valencianas, y en la que el valenciano sea la lengua vehicular. Ese debería haber sido desde el principio el objetivo de la RTVV: un servicio público que ofreciera contenidos audiovisuales de calidad utilizando con eficiencia los recursos públicos. Sin embargo, los políticos, primero del PSPV y luego del PP, la utilizaron para sus fines partidistas, y la calamitosa gestión desarrollada sobre todo durante el gobierno del PP la ha conducido a un callejón de difícil salida que los errores cometidos en la tramitación del ERE han convertido en paredón insalvable. Los trabajadores que se felicitaban del fallo del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana debían haber previsto que ello abocaba a la empresa al cierre, y cuando esa misma tarde se conoció la decisión del Consell toda la plantilla se dio cuenta de que se iban a la calle sin remedio. Sí, sin remedio, por mucho que los partidos de la oposición aprovechen la ocasión para hacerles creer que hay alternativas al cierre. Ayer, Enric Morera, de Compromís, en un debate con Serafín Castellano, Chimo Puig y Marga Sanz no tenía reparos en presentar una de esas “alternativas”: reclamar al gobierno central el pago de la “deuda histórica” que se tiene contraída con Valencia, y que, según él, superaría los 10.000 millones de euros. Con ese dinero, sostenía Morera, incluso sólo con los intereses que corresponderían al año por esa cantidad, el asunto estaría resuelto. Soy el primero es manifestar mi indignación con la infrafinanciación que padecemos los valencianos, un verdadero escándalo comparado, por ejemplo, con comunidades como Cantabria (por referirme a las de régimen común, pues lo del concierto navarro y el cupo vasco es un atraco bochornoso), y la sociedad valenciana debería hacer valer sus argumentos desde la lealtad, pero con seriedad, energía, constancia y coherencia. Ahora bien, pretender dar esperanzas a los trabajadores esgrimiendo semejante “solución” de los mundos de yuppie no parece el mejor aval para alguien que aspira a desempeñar en breve tareas de gobierno. Por otra parte, con la sentencia del TSJ sobre la mesa, cualquiera puede entender que ahora no es posible sentarse a negociar un nuevo plan de viabilidad. La gestión calamitosa de la empresa, el chapucero ERE y la sentencia han hundido sin remedio RTVV. Todos los implicados deberían ser conscientes de su grado de responsabilidad, y no poca tienen unos sindicatos que han actuado con una escalofriante insensatez al no ser capaces de medir las consecuencias de sus actos, incluso teniendo razón.

Lamento mucho el cierre de RTVV, y espero que pronto podamos contar con un servicio público austero y eficiente de radiotelevisión pública valenciana, pero Fabra ha acertado plenamente. Es más, estamos ante una decisión que por primera vez permite ver en él un líder. El cierre es una demostración de la mala gestión del PP, pero decidir bien es tomar la mejor decisión posible en función de las circunstancias. Una vez conocido el fallo del TSJ, Fabra podía haberse visto tentado a recular, explicar y tratar de convencer a Rajoy de que no podía asumir el coste político del cierre y acto seguido rogarle a Montoro que, puestos a incumplir el objetivo de déficit, aprovechara para añadir unos milloncetes al FLA y fiarlo todo al cambio en el modelo de financiación. Ha estado muy lúcido al negarse a seguir ese camino. La prioridad de Fabra ha sido tomar la mejor decisión posible y no justificar las vergüenzas de gobiernos anteriores, por mucho que pertenezcan a su partido. El acierto se ha visto aumentado con la reacción de la oposición. Bien está, faltaría más, que aprovechen para criticar duramente la gestión del PP en este tema y de paso en todos aquellos que estimen conveniente. Bien está también que demanden una radiotelevisión pública de calidad, y que se afanen en anunciar que no dudarán en destinar a ello dinero público. Pero es una torpeza grave y absolutamente innecesaria criticar la decisión del cierre cuando realmente no hay alternativa sensata. Por congraciarse con los trabajadores de RTVV, que además no lo merecen, porque han demostrado un comportamiento incompatible con la deontología profesional exigible a un periodista durante muchos años –incluyo los del gobierno Lerma-, han quedado en evidencia frente al conjunto de los ciudadanos valencianos, muchos de los cuales pueden empezar a pensar que Fabra, a pesar de que no es precisamente Cicerón, igual es más sensato que una oposición que reclamando una rectificación de la decisión adoptada parece incapaz de darse cuenta de que no nos podemos permitir una televisión pública de 1.600 trabajadores.

martes, 24 de septiembre de 2013

Un apunte sobre la calidad de la docencia universitaria

Hace unos días, en el marco de una reunión entre profesores de Derecho, se presentó la oportunidad de dialogar sobre la calidad de la formación que reciben nuestros alumnos. En un momento dado una compañera tomó la palabra para defender la importancia de las clases presenciales frente a las diferentes posibilidades de formación que hoy permiten las nuevas tecnologías, y para sostener, en el marco de esta reflexión, que la calidad de la enseñanza universitaria se ha degradado mucho en estos últimos veinte años. Intervine para mostrar mi coincidencia plena con relación a la importancia de las clases presenciales y mi discrepancia en lo que atañe a la degradación de la calidad de la enseñanza.

Existe la tendencia a descalificar casi todos los cambios que se producen en el ámbito universitario, que desgraciadamente han sido demasiados en los últimos tiempos, incluyendo la reforma de Bolonia, que a mi juicio ha sido negativa, al menos por lo que respecta a los estudios jurídicos. Hay muchas cosas de la universidad española que no me gustan, además de Bolonia, pero si algo ha mejorado en los últimos tiempos ha sido la calidad de la enseñanza en la Universidad pública, lo cual desgraciadamente ha coincidido con un notable bajón en el nivel de los alumnos que acceden a la Universidad. Hace veinte años conocí una universidad masificada (estudié en la Universidad de Valencia) en la que resultaba imposible realizar ningún tipo de práctica y en la que el profesor era prácticamente inaccesible para el alumno. Además, la libertad de cátedra se ejercía en ocasiones de un modo arbitrario, hasta el punto de que un profesor especialista en la estructura de la propiedad de la tierra en el Reino de Valencia durante el siglo XVI te forzaba a estudiar dos ensayos suyos sobre este tema para superar la asignatura Historia del Derecho (les aseguro que esto es cierto). Muchas veces pienso que hubiera podido aprender mucho más de haber cursado los estudios de Derecho en la Universidad en que trabajo, y creo que podría decir lo mismo de la gran mayoría de universidades públicas españolas. Es verdad que para los profesores la labor docente está incluyendo unos conocimientos informáticos cada vez más exigentes, y que la burocracia nos asfixia en ocasiones. Pero hay que decir en honor a la verdad que la docencia es bastante mejor que en el pasado. 

sábado, 14 de septiembre de 2013

Ahora Mas debe mover ficha

Firme, pero conciliador. Así resumiría el mensaje de Rajoy a Mas en la carta que se ha conocido hoy. A la vista de los acontecimientos de los últimos días podría dar la impresión de que Mas no se ha movido un ápice de su posición original, sobre todo con la nueva apelación a que el parlamento catalán se pronuncie por amplia mayoría a favor de la consulta. Creo que esta firmeza forma parte del guión. Mas está obligado a dar la impresión de presionar al máximo para que se celebre la consulta. La cuestión es cómo va a reaccionar ante la segura negativa que va a encontrar (no hay más que leer la carta de Rajoy). Las referencias de Mas a "amplias mayorias" y a "elecciones plebiscitarias" permite aventurar que CiU no se sumará a ERC en su intención de apostar por una declaración unilateral de independencia. ¿O sí? Sus bases presionarán y quizá se termine dando el paso, en cuyo caso creo que el problema va a ser gordo. Hace poco trabé amistad con un profesor nacionalista catalán que me decía que Cataluña debía declararse independiente. Yo le respondía que el gobierno no tendría más remedio en ese caso que utilizar el ejército. Él dudaba de que se llegara a tomar esa medida, pero estoy convencido de que sería así y de que la cosa no acabaría bien. Sigo pensando que lo mejor que puede pasar es que se llegue a las "elecciones plebiscitarias" y se tome nota de la particación y los resultados. Si vota más del 70% y los partidos secesionistas suman el 75% de los votos, hay que sentarse a proponerle al pueblo español una reforma constitucional para que deje marchar a los catalanes, pues en ese caso la secesión favorecería la concordia. Dudo mucho que se alcancen esas cifras, pero sin duda convendría afrontar el asunto de frente, es decir, hablando abiertamente de independencia, aunque respetando los cauces legales.

domingo, 8 de septiembre de 2013

Alivio

Suspiré de alivio cuando me enteré de que las olimpiadas no se celebrarían en Madrid. No sólo porque soy de los que piensan que este tipo de eventos no salen gratis, sino porque empiezo a sentir verdadero asquito por la alta competición. Hay que diferenciar entre el deporte, que practicado con moderación, espíritu lúdico y afán de superación personal es muy beneficioso, y el deporte profesional que, salvo honrosas excepciones, es un mundo de ambiciones, trampas e inhumanidad, empezando por el fútbol. Casi todo es exceso, y ya se sabe que eso es incompatible con la virtud. Madrid no necesita unos Juegos Olímpicos para seguir siendo la ciudad abierta, cosmopolita y acogedora que ya es. 

sábado, 7 de septiembre de 2013

Elysium

Al comienzo parecía que esta película iba a proponer una reflexión (estilo "Inteligencia artificial") sobre injusticias relativas al desigual acceso a los avances de la medicina, problema que ya es hoy claramente visible y que se acentuará en el futuro en el que se desarrolla la película, pero termina conviertiéndose en una vulgar película de acción. No obstante, entretiene. Para pasar el rato.

Mas rectifica

Después de escuchar que Mas no planteará ninguna consulta a los catalanes en 2014 si el gobierno no lo autoriza, y que en ese caso convertirá en plebiscitarias las elecciones autonómicas catalanas de 2016, puede decirse que CiU ha rectificado sustancialmente su postura con relación a la consulta soberanista. Las elecciones de 2012 ya fueron plebiscitarias, pues se convocaron con el explícito propósito de impulsar la autodetermincación tras la multitudinaria manifestación de la diada. Creo que esta estrategia, aunque pueda parecer más sensata, ahondará en el desgaste electoral de CiU en beneficio de ERC. El votante soberanista de CiU volará a ERC y no creo que los convergentes recuperen el voto de aquellos que desconfían de las aventuras separatistas. Al mismo tiempo, la postura de Mas pone en serio riesgo el acuerdo de gobierno entre estas dos formaciones, pues es comprensible que ERC interprete el giro de Mas como una tomadura de pelo. 

De todas formas, la cuestión catalana sigue pendiente y a estas alturas parece claro que no es posible limitarse a esgrimir la Constitución para afrontar las ansias independentistas. Creo que Rajoy y Mas coinciden en dar total prioridad a lo urgente, la crisis económica, y están de acuerdo en otorgar carácter plebiscitario a las elecciones de 2016. Mas ya declaró hace algunos meses que la secesión requería una mayoría muy amplia, y esto es precisamente lo que habrán comentado. Si tras una participación notable hay una amplia mayoría favorable a la autodeterminación, Rajoy, que ya habrá pasado la reválida de las urnas, podría admitir la conveniencia de abrir un diálogo político que contemple una reforma de la Constitución. Supongo que ambos habrán coincidido en poner el listón muy alto antes de dar pasos arriesgados, entre otras cosas porque sospecho que Mas empieza a ver que el independentismo era mejor negocio que la independencia, por lo menos desde la perspectiva de consolidar el poder político de CiU.

lunes, 2 de septiembre de 2013

Quéjese

Habrá que posponer la reflexión que anunciaba, y no por falta de ganas, sino de tiempo para tratar el tema con el rigor que merece. Un comentario publicado hoy en la archifamosa entrada "Los ruidos del frigorífico" -la responsable del 90% de las visitas al blog- me sirve de excusa para saludarles y dar señales de vida. El autor del comentario se queja del ruido al que nos vemos sometidos habitualmente. Como sobre ese tema ya he escrito bastante, sólo me gustaría añadir que, sin obsesionarse, en la medida de lo posible, hay que mostrar el malestar que nos provocan esos ruidos o sonidos molestos que contribuyen a mantenernos alterados, un estado incompatible con el verdadero bienestar. Por ello, hace pocas semanas, me he quejado a la empresa de autobuses urbanos de Elche de que los autobuses llevan siempre la radio puesta y con un volumen muy alto -por lo menos eso me ha sucedido las pocas veces que he subido-. Y sospecho que algo parecido tendré que hacer en el IVO (Instituto Valenciano de Oncología) con los programas de televisión que en algunas zonas se ven obligados a tragarse personas que no están allí precisamente para pasar el rato. Creo que costaría muy poco tener un poco de sensibilidad con todos estos temas. Pero si no es así, hágase un favor y háganoslo a los demás: quéjese. 

martes, 13 de agosto de 2013

Previos a una reflexión sobre el amor

Veré si encuentro un hueco los próximos días para desarrollar una breve reflexión sobre el amor, tema sobre el que he pensado largamente en los últimos años. De los muchos textos que merecerían comentarse, he querido transcribir uno de Anthony de Mello incluido en su polémico (por herético, en sentido riguroso) libro “Autoliberación interior”. Antes de exponer mis opiniones sobre este texto y sobre otros a los que tendré que referirme les invito a que lo lean con calma y, si les apetece, realicen algún comentario.

“Donde hay amor no hay deseos. Y por eso no existe ningún miedo. Si amas de verdad a tu amigo, tendrías que poder decirle sinceramente: “Así, sin los cristales de los deseos, te veo como eres, y no como yo desearía que fueses, y así te quiero ya, sin miedo a que te escapes, a que me faltes, a que no me quieras”. Porque en realidad, ¿qué deseas? ¿Amar a esa persona tal cual es, o a una imagen que no existe? En cuanto puedas desprenderte de esos deseos-apegos, podrás amar; a lo otro no se lo debe llamar amor, pues es todo lo contrario de lo que el amor significa.

El enamorarse tampoco es amor, sino desear para ti una imagen que te imaginas de una persona. Todo es un sueño, porque esa persona no existe. Por eso, en cuanto conoces la realidad de esa persona, como no coincide con lo que tú te imaginabas, te desenamoras. La esencia de todo enamoramiento son los deseos. Deseos que generan celos y sufrimiento porque, al no estar asentados en la realidad, viven en la inseguridad, en la desconfianza, en el miedo a que todos los sueños se acaben, se vengan abajo.

El enamoramiento proporciona cierta emoción y exaltación que gusta a las personas con una inseguridad afectiva y que alimentan una sociedad y una cultura que hacen de ello un comercio. Cuando estás enamorado no te atreves a decir toda la verdad por miedo a que el otro se desilusione porque, en el fondo, sabes que el enamoramiento sólo se alimenta de ilusiones e imágenes idealizadas.

El enamoramiento supone una manipulación de la verdad y de la otra persona para que sienta y desee lo mismo que tú y así poder poseerla como un objeto, sin miedo a que te falle. El enamoramiento no es más que una enfermedad y una droga del que, por su inseguridad, no está capacitado para amar libre y gozosamente. La gente insegura no desea la felicidad de verdad, porque teme el riesgo de la libertad y, por ello, prefiere la droga de los deseos”.


Anthony de Mello

martes, 23 de julio de 2013

Piénsenlo al abrocharse el cinturón

Si les preocupa ser cada día mejor persona y ayudar a construir un mundo mejor no es necesario irse al Nepal o ponerse en manos de un "coach" que nos cobre 20.000 euros por curso. Tenemos a nuestro alcance una sencilla posibilidad que personalmente procuro explotar al máximo. Cada vez que nos subimos al coche tenemos la oportunidad de hacer más amable nuestra ciudad respetando generosamente un paso de cebra, facilitando la incorporación de otro conductor a nuestro carril, sonriendo y agradeciendo la deferencia de otro conductor, y también tenemos la oportunidad de aprender a controlar la ira o de ser pacientes y comprensivos. Si son de los que se estresan al volante, hacen lucecitas o están siempre con el taco en la punta de la lengua y se han visto al borde de la tragedia en una discusión de tráfico, les sugiero que recapaciten y sean conscientes de las posibilidades de crecimiento personal que nos ofrece conducir. Sería interesante que las autoescuelas no olvidaran que conducir no es sólo un saber técnico, tanto en lo que se refiere al vehículo como a las normas de la circulación, sino una forma de relacionarse con otras personas -cientos, miles- con el objetivo común de llegar a un determinado lugar.

jueves, 18 de julio de 2013

El problema no es Susana Díaz

No nos escandalicemos porque Susana Díaz, la candidata socialista a suceder a Griñán, como tantos otros, lleve toda su vida dedicada a la política -carne de aparato he leído que le llaman-. El problema es de los partidos que no tienen reparos en encumbrar a este tipo de gente (incluso en las primarias debería existir algún tipo de filtro que garantice una cierta idoneidad de los candidatos) y de los ciudadanos que en último término otorgamos nuestro voto. En estos días es habitual escuchar a algunos intelectuales exhortar a la rebelión civica. Me daría por satisfecho con que cada ciudadano actuara con responsabilidad, más necesaria que nunca, en dos terrenos: ejercicio de la libre expresión donde a cada cual le sea posible y sufragio meditado para que en ningún caso se vote a candidatos manifiestamente mediocres. Esa es la única manera de responder a casos como el de Susana Díaz.

viernes, 28 de junio de 2013

La noche de los rábanos salados

En España siempre han estado bastante arraigadas esas excelentes obras de misericordia que son dar de comer al hambriento y dar posada al peregrino. Cuando llegaba a casa de mis padres el cobrador de Finisterre o el señor que tenía que mirar el contador del gas mientras estábamos comiendo, mi madre siempre soltaba ese españolísimo “¿quiere comer?”. Si en España te visitan familiares es habitual alojarles en tu casa antes que dejarles ir a un hotel. Las posadas y los hoteles siempre han sido para los españoles establecimientos mercenarios de último recurso. En los últimos tiempos las cosas han cambiado y la mayor parte de nuestros hoteles suelen disponer de todo tipo de servicios y comodidades. Nada que ver con las posadas, fondas y hostales de los años cincuenta que conoció el filósofo del derecho francés Michel Villey, quien en su “Compendio de Filosofía del Derecho” –si mal no recuerdo- bromea a lo Chiquito de la Calzada con que no sé qué estaba más vacío que una pensión española. Sí, los tiempos han cambiado y está muy bien que los hoteles hayan mejorado, pero, por favor, no perdamos nuestra hospitalidad tradicional. Sigamos viendo el hotel como el lugar mercenario de último recurso que en realidad es.

Este sentido de la hospitalidad siempre me ha parecido genuinamente español, pero también lo he visto en algunos franceses del sur que he tenido oportunidad de conocer y, pásmese lector, he tenido la suerte de disfrutar de la hospitalidad alemana (no se apure, luego le cuento). Ello me ha hecho pensar que quizá la razón radique en que se trata de conductas profundamente ligadas a la religión. Muchos despotrican contra la edad media dejándose llevar por prejuicios, pero durante esa época en Europa estaba socialmente vigente la obligación de dar posada y comida al peregrino. Eso, que sigue por cierto presente entre los musulmanes, lo hemos ido perdiendo con la progresiva secularización de nuestra sociedad. Podría decirse que a mayor secularización mayores posibilidades de que la visita de uno acabe en un hotel.

Y les cuento la anécdota alemana por dos razones. Primero, porque me he metido mucho con los alemanes en los últimos tiempos y como sospecho que con la cumbre del fin de semana igual tengo que volver a darles cera así compenso un poquito. En segundo lugar, porque la anécdota creo que ilustra bien esa relación entre vivencia de la religión que se traslada a buenas acciones. Bueno, quizá haya una tercera razón, y es que esto de ir en taparrabos en verano me está resultando de lo más cómodo. Al grano. En el segundo curso de Derecho, en el año 1990, formaba parte del equipo de fútbol de la Facultad de Derecho de la Universidad de Valencia. Un día se incorporó al equipo un estudiante alemán y charlamos un rato. Tampoco nos hicimos íntimos amigos. En otoño yo iba a viajar a Dinamarca en tren, y tenía que pasar una noche en Hamburgo antes de tomar al día siguiente otro tren para llegar a Aarhus, mi destino. Se lo dije al alemán y, como era de Hamburgo, aunque estudiaba en Salzburg, me dio su dirección y teléfono para que quedáramos, si tenía tiempo y daba la casualidad de que él estaba por allí. Guardé los datos mecánicamente con la convicción de que no le iba a llamar. Total, se trataba de llegar por la tarde a la estación, buscar un hostalillo para pasar la noche y partir a primera hora. No sospechaba yo que cierto evento en Hamburgo iba a dejar la ciudad sin una habitación libre. Deambulé con mi mochila de hotel en hotel recibiendo siempre la misma respuesta: todo estaba completo. Se me pasaron por la cabeza varias soluciones hasta que reparé en que tenía la dirección del amigo alemán. Había que intentarlo, así que telefoneé y contestó su madre. Él no estaba allí y le expliqué a la buena mujer quién era yo y cuáles eran mis circunstancias. Imagínense, un desconocido español que dice ser amigo de su hijo. ¿Qué harían ustedes? La señora se separó un momento del auricular para hablar con su marido y sólo tardó unos pocos segundos en decirme que fuera a dormir a su casa. ¡Oh, qué maravillosa sensación saber que había una cama para mí en una ciudad extraña! Llegué, conocí a sus padres, y estos me enseñaron la habitación de su hijo en la que pasaría la noche. Había dos grandes fotos allí. Una de Helmut Kohl y otra del papa, Juan Pablo II. En nuestras escasas conversaciones españolas habíamos hablado de política y de religión y yo sabía perfectamente que él era un católico prácticamente fiel partidario de la CDU (hoy defiende a Merkel). Y también supe después que su familia era muy religiosa, aunque con una particularidad: su padre y él eran fervientes católicos, mientras que su madre y su hermana eran protestantes luteranos. La conversación con los padres de mi amigo Andreas (así se llama) durante la cena fue muy agradable, aunque tuve que pagar un precio: no olvidaré los rábanos con sal crudos que comimos en la cena y que, lógicamente, no iba a despreciar, pese a que me resultaban verdaderamente repugnantes. Dormí a pierna suelta y a la mañana siguiente el padre de Andreas me llevó a la estación donde tomé el tren para Aarhus dispuesto a vivir una nueva aventura.

jueves, 13 de junio de 2013

Dos preguntas mollares

Dos preguntas excelentes de José García Domínguez:

"¿Por qué un accionista español o un tenedor de participaciones preferentes (los depósitos están garantizados) deben sufrir quebrantos si una entidad quiebra, pero no así el banco alemán que compró sus cédulas hipotecarias? ¿Por qué Merkel solo cree en el libre mercado cuando los que salen perdiendo son otros? No nos rescatan: somos nosotros quienes los vamos a rescatar a ellos. Y pensar que aún hay quien no lo ha entendido".


Este hombre ve perfectamente cuál es el verdadero problema. Les aconsejo que lean sus opiniones.

martes, 11 de junio de 2013

Pendientes del Tribunal Constitucional Federal de Alemania

¿Se acuerdan de cuando Mario Draghi dijo aquello de que el Banco Central Europeo haría lo necesario para salvar el euro, con la famosa apostilla “y, créanme, será suficiente”? Se refería Draghi a la posibilidad de que un Estado de la unión monetaria solicitara formalmente el rescate y se pusiera en marcha un mecanismo de compra de deuda pública por el BCE en los mercados secundarios de deuda para rebajar la presión y garantizar la sostenibilidad (al menos a corto plazo) del Estado rescatado. En Alemania aquello no convenció a muchos, porque pensaban que esa compra de deuda por parte del BCE suponía ir más allá de sus funciones utilizando recursos, entre otros, del contribuyente alemán. Esta es la razón por la que en Alemania se presentó un recurso ante el Tribunal Constitucional sosteniendo que dicha compra masiva de deuda pública era contraria a la Constitución alemana. Pues bien, para que se den cuenta de cuál es la posición de Alemania en esta crisis, en una información que hoy publica “El País”, una encuesta difundida por el diario económico Handelsblatt apunta que casi la mitad de los alemanes está en contra de ese programa de compra de deuda, mientras que solo un tercio lo apoya. ¿Aparte de que nos hundamos en la miseria para pagar lo que les debemos, qué estrategia tienen los alemanes para acabar con la crisis? 

martes, 4 de junio de 2013

Concierto de Chenoa en el Gran Teatro de Elche

El pasado domingo, por la tarde, asistí al concierto de Chenoa en el Gran Teatro de Elche. Fue una suerte que viniera por Elche y que todavía quedaran entradas cuando me enteré el día antes. Estuvo muy bien, a pesar de que, según ella, padecía un catarrillo. Quizá no tenga un oído fino, pero a mí me pareció que su voz sonó estupenda. Era un concierto acústico en el que únicamente le acompañaban dos guitarristas. Este austero acompañamiento no mermó en absoluto la calidad del concierto y de paso permitió que el precio fuera asequible. No sabía que había mejorado tanto su repertorio, ni que se hubiera dedicado a componer sus propios temas. La verdad es que me gustaron y demuestra ser una artista muy completa. Estuvo simpática y creo que todos los asistentes tuvimos la impresión de que se entregó y que, al igual que el público, disfrutó. Cuando comenzó a ser conocida me resultaba un poco arrogante, pero he dejado de tener esa sensación. Por cierto, cada vez la veo más guapa, más mujer (se mezcló con el público y cuando se me puso a tiro, como un quinceañero, le saqué la foto que publico). Lástima que redujera ese generoso trasero rubensiano que Dios le dio. 

¿Punto de inflexión?

Me encantaría creer que el dato de paro de mayo que se acaba de conocer es el punto de partida de una recuperación económica que, comenzando por la reducción del desempleo, nos va a permitir crecer, controlar el déficit y pagar la deuda. Con gusto me olvidaría de la profecía que publiqué el otro día si pensara que hay razones para ello. Lo siento lector. No, no crea que soy de naturaleza pesimista, sucede sencillamente que un análisis frío y racional de la situación me impide creer que estamos ante un punto de inflexión.

Si con un veintitantos por ciento de paro no hay buenos datos en el mes de mayo… Hay que combatir el paro y hay que crecer. Pero lo importante, lo que desgraciadamente no podemos olvidar, es que hay que crecer lo suficiente como para devolver las deudas privadas y públicas que tenemos contraídas los españoles. Y ahí está el verdadero problema. Yo no veo cómo podemos alcanzar ese nivel de crecimiento con estas políticas de austeridad y, sobre todo, sin soberanía monetaria. Así es muy difícil, porque si quieres ser competitivo necesitas recurrir a una devaluación interna –en eso estamos- que lastra el crecimiento en tanto la bajada de los sueldos -que no se ve proporcionalmente compensada por el control de precios- afecta muy negativamente al consumo. La solución con este corsé que representa la unión monetaria es que España sea competitiva a base de una transformación radical de la nación (política de reformas) que, aunque deseable e imprescindible en muchos terrenos (reforma de la administración, laboral, unidad de mercado, reducción de trámites burocráticos, educación pública de la máxima calidad), es una utopía cuando se plantea como un objetivo ineludible a corto plazo para superar la crisis. 

No me malinterpreten. No deseo que España se convierta en un país de turistas capaz de competir a través de fabricar productos baratos y de baja calidad. Debemos aspirar a la excelencia, pero una excelencia que pasa por una transformación gradual de la nación en la que nosotros, los españoles, seamos quienes formulemos y lideremos nuestros propios proyectos. Por eso la unión monetaria es una enorme dificultad para países como el nuestro. Y ahora va y parece que IU se apunta a la idea de que hay que abandonar el euro. Che, lector, al final va a pensar que soy un izquierdista radical. Yo ya no sé ni lo que soy…

lunes, 27 de mayo de 2013

Análisis de lo dicho por Aznar en la entrevista

En la penúltima entrada apuntaba que no estaba completamente de acuerdo con lo que dijo Aznar en la polémica entrevista que concedió en Antena 3. Según él, para superar la crisis que vivimos España necesitaba cinco tipos de medidas que concretaba así:

1. Hacer un Estado viable, eficaz y sostenible.
2. Reformar unas instituciones que garanticen el funcionamiento del Estado de Derecho.
3. Reforma de la economía incluyendo una reforma fiscal que reduzca los impuestos y favorezca a las clases medias.
4. Nuevo pacto social (pensiones, etc.).
5. Recuperar la posición internacional de España.

A ese programa de acción debe añadirse que para Aznar el verdadero origen de la crisis se halla en la desagregación del Estado, es decir, en la ausencia de instrumentos que garanticen la cohesión.

Nadie discutirá que es fundamental que las instituciones democráticas garanticen el funcionamiento del Estado de Derecho (punto 2). El logro de este objetivo requiere pactos de Estado. Sin embargo, Aznar destacó la necesidad de que el gobierno haga valer su mayoría absoluta y minusvaloró la importancia de dichos pactos. Parece un contrasentido. El PP, por ejemplo, no puede aspirar a una reforma de la justicia o del Tribunal Constitucional sin contar con el respaldo de otros partidos y, en especial, del PSOE. El punto 1 y el 4 están estrechamente relacionados, ya que un Estado viable depende de cómo entendamos el Estado social de Derecho. También aquí parece que si hablamos de pacto social, al menos en los mínimos sea conveniente lograr un Pacto de Estado. El pacto de Toledo relativo a las pensiones es un pacto de Estado. En definitiva son políticas que requieren concordia por parte de las fuerzas políticas. No sucede así con el punto 3, que es el único que legítimamente puede abordarse con la mayoría absoluta que respalda al gobierno. Aznar propone una reforma de la economía, pero no concretó en qué debía traducirse. Su mensaje más preciso fue el relativo a la bajada de impuestos, y aquí la cuestión es si esa bajada repercutirá positivamente en el crecimiento y en la recaudación en un contexto recesivo. Es un tema muy complejo en el que sólo se puede especular. Sí se puede afirmar que en este punto el PP no está cumpliendo su programa y podría decirse que es lógico que Aznar, si estima que sería buena una bajada de impuestos, critique la política del gobierno. En cuanto al punto 5, estoy plenamente de acuerdo, pero hay que definir cuál es el posicionamiento por el que aboga Aznar, sobre todo en el contexto europeo. ¿Debemos aliarnos con las tesis de Merkel o liderar una corriente crítica? Ahí es donde debían haberle pedido a Aznar que se definiera.

Si analizamos, pues, la crítica de Aznar nos damos cuenta de que concretó muy poco, y lo que apuntó sólo puede realizarse a través de unos pactos de Estado que desdeñó. De todas formas, su intervención me pareció interesante y en modo alguno creo que deba verse como un comportamiento desleal, sobre todo si se apunta a que se trata de una deslealtad hacia su partido. Ese tipo de lealtad habría que erradicarla. Hay que ser leal a aquello que lo merece y sin duda los intereses electorales de un partido no lo son. Me parece absolutamente saludable y necesario que los políticos expresen libremente su opinión. Los bobos solemnes como Zapatero prefieren disfrazar de lealtad su falta absoluta de autoridad para ofrecer puntos de vista relevantes sobre la situación que estamos atravesando.

Mucho más interesante que esos cinco puntos que propuso Aznar fue su breve alusión a la verdadera causa de la crisis. Aquí discrepo de lo que dijo. La crisis que vivimos no ha sido causada por la ausencia de instrumentos que garanticen la cohesión, aunque sin duda haya que procurarlos. La crisis tiene causas muy profundas, pero la más evidente es la calamitosa adopción del euro. Esa decisión, la política monetaria europea y, en menor medida, las políticas del gobierno Zapatero han sido las que nos han conducido a este callejón de difícil salida. Y en este punto Aznar tiene mucho que decir, y habría mucho que preguntarle. Fue una lástima que los periodistas no lo hicieran. 

jueves, 23 de mayo de 2013

"Operación E"

Anoche, día del espectador, acudí a los cines Odeón de Elche para ver “Operación E”, una película impactante, basada en hechos reales, sobre las injusticias que ha padecido, y supongo que todavía padece, la pobre gente de Colombia por parte de las FARC, pero también de un gobierno que no parece comprender que los colombianos sólo quieren vivir, sacar adelante a sus familias sin verse arrastrados por la violencia. La película impacta por la implacable y continua injusticia que sufre el protagonista y su familia. No hay escenas cruentas, violencia gratuita, sino un sufrimiento constante que los protagonistas sobrellevan estoicamente esperando con resignada tristeza que llegue un momento que les permita levantar cabeza y simplemente vivir con algo de tranquilidad. Otra de esas películas que nos ayudan a tomar conciencia de lo que tenemos, a relativizar nuestras preocupaciones.  Muy recomendable por cierto para comprender la realidad colombiana. La interpretación del protagonista, Luis Tosar, es sencillamente magistral. Me imagino los esfuerzos que le debió costar adquirir el acento colombiano. Un excelente actor sobre el que recae el peso de la película. 

miércoles, 22 de mayo de 2013

Aznar ataca duramente a Rajoy

La dura crítica de Aznar al gobierno y el hecho de que no descarte regresar a la política ha acaparado todos los titulares y comentarios políticos. Pienso que hay razones sobradas para criticar al gobierno, como fácilmente se puede deducir de la lectura del blog, aunque no comparto todas las críticas de Aznar. Sí estoy muy de acuerdo con él en que es fundamental que el gobierno ofrezca esperanza y no "lánguida resignación", para lo cual coincido en que resulta imprescindible contar con un claro y sólido proyecto nacional que no se ve por ninguna parte (acometer reformas -por muy profundas que sean- no es contar con un proyecto político). Ahora bien, en pocos días estas declaraciones serán olvidadas y Aznar no regresará, aunque quiera. No veo posible que un partido tan presidencialista como el PP permita algo así. Me llevaría una sorpresa si realmente Aznar diera un paso al frente y decidiera intentar recuperar el poder. Eso sí, me parecería muy saludable que pudiéramos asistir a una lucha por el poder basada en discrepancias políticas capaces de ser debatidas públicamente.

martes, 21 de mayo de 2013

Parece que Rajoy está en un callejón sin salida

Nasarre y García Escudero han declarado ante el juez que cobraron sobresueldos del PP, y el primero además dice haber recibido 70.000 euros para una fundación en calidad de donación anónima. La noticia de "El Mundo" parece confirmar que la contabilidad atribuida a Bárcenas puede ser cierta y que, por tanto, hubo dinero opaco cuyos destinatarios fueron dirigentes y/o cargos del PP. Rajoy había dicho que eso no era cierto, así que si los propios miembros de su partido le desmienten la verdad es que yo no veo otra salida que no sea la dimisión. Son declaraciones tan demoledoras que apenas dejan margen para el comentario. Habrá que ver cómo acaba este asunto. Aunque es otro tema, será interesante escuchar las respuestas de Aznar en la entrevista de esta noche, pues hay datos de la trama Gürtel que le afectan personalmente. 

P.D. El PP responde a la información de El Mundo que esos sobresueldos, pese a existir, no eran opacos, sino que se ajustaban a la más estricta legalidad. Como digo, veremos...

miércoles, 15 de mayo de 2013

La clonación ya es posible

La clonación ya es técnicamente posible. Es seguro que algunos Estados autorizarán la clonación de embriones con fines terapéuticos y que los millonarios harán cola para garantizarse una larga vida. Por una parte está el debate moral de si la clonación atenta contra la dignidad humana; pero una vez esta sea legalmente admitida en muchos Estados bajo estrictas condiciones, la cuestión capital va a ser la lucha por un justo acceso a dichas posibilidades, cuyo coste presumiblemente será difícil de asumir por un sistema público de salud.

lunes, 13 de mayo de 2013

Los políticos de la nueva generación piden paso

Si se examina la política española desde una perspectiva generacional, Rajoy es una anomalía: Zapatero, un presidente nacido en 1960, fue sustituido después de dos legislaturas por otro nacido en 1955, y además de perfil conservador, en el sentido de poco dado a introducir cambios profundos. Como he explicado en mi libro Justicia transicional, memoria histórica y crisis nacional, Zapatero pertenece a la generación de los nacidos entre 1961 y 1976, mientras que Rajoy es de la generación anterior (1946-1961). En 2011 fue como si los españoles sintieran vértigo al ver que con Zapatero se erosionaban los pilares del proyecto que comenzó en la Transición (al margen de su nefasta gestión de la crisis económica) y decidieran rectificar y apostar por lo “seguro”. Pero la historia no se detiene y mientras Rajoy no acierta a interpretar adecuadamente el momento político que vivimos estamos viendo emerger a políticos de una nueva generación, nacidos entre 1976 y 1991, como Albert Rivera, Eduardo Madina, Alberto Garzón o Beatriz Talegón, por citar aquellos de los que más se habla últimamente. Da la impresión de que la generación de Zapatero (la mía, dicho sea de paso) va camino de ser una generación de transición en términos políticos, y que si Nuñez Feijoo no lo remedia podemos pasar de un presidente nacido en el 55 a otro nacido más de veinte años más tarde.  

domingo, 5 de mayo de 2013

"Hispanoamérica", de Julián Marías

Ayer recibí un insospechado regalo que me hizo muy feliz. Mi amigo Pepe deseaba deshacerse de libros que no le cabían en su biblioteca y pensó que quizá me podría interesar “Hispanoamérica”, de Julián Marías, una de las pocas obras de este autor que me faltaban, y además sobre una realidad apasionante. No podría haber escogido nada más adecuado para regalarme. Como últimamente me levanto de madrugada y tenía el libro sobre la mesita comencé a leer. La primera reflexión de Marías sobre la conquista y colonización española del nuevo continente es un excelente aperitivo. Marías comienza el libro asombrándose de cómo fue posible que en poco más de cincuenta años los conquistadores españoles llegaran y dejaran su huella en tantos lugares de América de tan difícil acceso, desde México a la Pampa argentina. Como él dice, es inverosímil, sobre todo si se compara con los ingleses, que una vez establecidos en las colonias del este fueron ocupando muy lentamente nuevos territorios. Desde luego nada que ver con la monumental, titánica, colosal empresa española. Me ilusiona aproximarme a Hispanoamérica de la mano de Marías. Seguro que, como siempre me sucede con Marías, al que tuve la fortuna de ver en persona en una conferencia que pronunció en Valencia en 1997, me aguardan en estas páginas observaciones agudas e ideas provechosas.

lunes, 22 de abril de 2013

A Mariñas le tocaban 3000 euros en cada "Tómbola"

A Jesús Mariñas Canal 9 le pagaba 3000 euros de hace unos quince años cada vez que participaba en un programa de “Tómbola” (que eran semanales). Es verdad que el programa tenía mucha audiencia y generaba muchos ingresos publicitarios, pero no dejaba de ser un programa de telebasura en una televisión pública, y resulta bastante desagradable pensar que se ha destinado dinero público a pagar a este tipo de personajes. Nos podíamos haber quejado entonces, en lugar de reírnos a mandíbula batiente con la que allí se montaba, pero es ahora, al ver la penosa situación en la que están las arcas públicas, cuando más nos duele leer este tipo de noticias. 

jueves, 18 de abril de 2013

"Oblivion"

Acabo de ver "Oblivion", la última película protagonizada por Tom Cruise. Algunos critican que la historia es difícil de seguir y que el argumento es del montón, una más de esas películas en las que hay que salvar a la humanidad de las malvadas máquinas. Es posible que tengan razón, aunque a mí no me parece tan enrevesada. He disfrutado con los impresionantes efectos especiales, con el trabajo de Tom Cruise, como siempre, y, muy especialmente, con la música de la película. Me he quedado hasta el último crédito escuchando la canción. Un buen rato de cine.

P.D. Insisto en la calidad de la música del grupo M83.

http://www.youtube.com/watch?v=AVeHScYOHhY

lunes, 15 de abril de 2013

Una imagen de la vida en la calle

La noche del sábado me fui con mi amigo Óscar a tomar unas bravas nocturnas en "Los malagueños", uno de los clásicos de la zona Xúquer de Valencia, y más tarde acabamos en el “Café Latino”. En el trayecto pasamos por delante de dos de esos cajeros automáticos que se ubican en el interior de los bancos. En uno de ellos ya había una mujer pertrechada de mantas y cartones dispuesta a pasar la noche. Cuando regresábamos volvimos a pasar por delante de los cajeros y en el otro cajero vimos a tres hombres (indigentes) que charlaban sentados. El que estaba en el centro, medio desnudo, se masturbaba mientras conversaban, ante la indiferencia de los otros dos. Lo hacía mecánicamente, sin excesiva violencia y sin dar muestras de placer. No le importaba lo más mínimo que le vieran todos los que pasábamos por allí, pero tampoco parecía exhibirse. Supongo que este hombre daba por descontado que el pudor es un lujo que él no se podía permitir. La escena, que sólo contemplamos por décimas de segundo, tristísima, impactante, se me quedó grabada como una fotografía. 

Riesgo de discordia

Mientras Rajoy repite que la prioridad es la crisis económica y los suyos dicen “amén”, Cándido Méndez sostiene que con relación a la II República no cabe olvido ni perdón y en Madrid miles de personas se manifiestan a favor de la III República. El otro día comentaba el tema de la crisis de la monarquía con un amigo del PP y él le quitaba hierro al asunto, no le daba demasiada importancia. No se trata de que prefiera una u otra forma de régimen político, sino de las consecuencias que este debate puede tener para la convivencia democrática en España. IU se ha decantado abiertamente por la República. En el momento en que la juventud española comience a ilusionarse por ella de forma ampliamente mayoritaria es cuestión de tiempo que el PSOE se dé cuenta de que o se convierte en republicano o puede dejar de ser el referente de la izquierda política. Y si PSOE e IU abogan por la República, aunque no haya que dramatizar ni despertar los fantasmas de la guerra civil, sí resulta innegable que un importante factor de discordia habrá regresado a la vida española y habrá que hacerle frente, dar una respuesta, es decir, ponerse de acuerdo para ver qué hacemos. Quizá sea necesario plantearse un referéndum sobre la monarquía y la bandera. Lo que parece una irresponsabilidad es seguir actuando como si no pasara nada y aquí sólo importa la crisis económica.  Estamos inmersos en una crisis nacional que sólo podrá resolverse si se llama a las cosas por su nombre y se mira de frente a la realidad que es y no a la que nos gustaría que fuese. A partir de ahí, es imprescindible que se tengan ideas, proyectos, capacidad de diálogo, voluntad de concordia -que implica disposición a ceder- y firmeza para rechazar la mentira y el chantaje en cualquier ámbito.

miércoles, 10 de abril de 2013

Bolkenstein sugiere que Holanda y los de la triple A abandonen el euro

El holandés Frits Bolkenstein, ex comisario europeo, aboga por romper el euro y sugiere que Holanda y otros países triple A como Alemania y Finlandia creen una nueva moneda. Es una idea que ya se viene comentando hace tiempo, pero hasta ahora nadie había dado el paso de defenderla personalmente de manera pública. Bienvenido sea el debate, por mucho que les moleste a quienes se inquietan por la incertidumbre que generan en los mercados este tipo de opiniones. Está claro que va a ser difícil que el euro sobreviva, y conforme se alarga la crisis esto se hace más evidente. Si España siguiera en recesión en 2014, tal como pronostica la Comisión Europea, el desenlace sería casi inevitable y la ruina del sur, visible en Portugal, se consumaría con un previsible estallido social. El problema, pues, está en cómo acabar con el euro sin que a su vez se desmorone la Unión Europea.

domingo, 7 de abril de 2013

Un apunte sobre el cine de Clint Eastwood

Los personajes que protagonizan las películas de Clint Eastwood suelen ser individuos solitarios bajo cuya imagen de tipos duros se esconde un gran corazón. Eastwood logra emocionarnos cuando vemos que el yanqui del rifle dispuesto a liarse a tiros con el vecindario de inmigrantes es capaz de sacrificar hasta su propia vida por uno de ellos, al que termina apreciando más que a los de su propia sangre (“Gran Torino”). No menos emotiva es la escena de “Million dollar baby” en la que roto por el dolor Frank desconecta la máquina de Maggie, tetrapléjica y mutilada, mientras ella le despide con esa lágrima que se desliza por su mejilla (y por la de los espectadores) segundos antes de morir. Eastwood trata los sentimientos humanos con tal delicadeza y hondura que al ver sus películas uno experimenta una infinita gratitud. En “Million dollar baby” es normal destacar la tragedia de Maggie y el dilema moral de Frank, pero en esta película me impresiona el sufrimiento que ambos soportan calladamente por el amor no correspondido. Frank tiene una hija a la que escribe constantemente cartas que le son devueltas sin ni siquiera abrir. Es un rechazo frío, cruel, constante. No sabemos la causa, pero da igual, o al menos eso nos viene a decir Eastwood. Frank no se queja, lleva su sufrimiento en silencio. Guarda las cartas devueltas y sigue escribiendo a su hija, perseverando en un amor no sólo no correspondido, sino mancillado de desprecio. Maggie dedica su primer dinero ganado en el boxeo a comprarle una casa a su madre, quien lejos de mostrar algo de gratitud le reprocha que no le hubiera dado el dinero en lugar de comprarle la casa. El espectador queda tan atónito y asqueado como Frank cuando contempla la escena. Maggie y Frank viven la tragedia del amor no correspondido, de haber tenido la desgracia de topar con gente sin corazón y que esa gente sean los "suyos", pero no hablan de ello, siguen adelante y viven, confían en la vida. Los solitarios de Eastwood se empeñan en vivir, incluso el deseo de morir de Maggie no puede interpretarse como rendición, como falta de interés por la vida. ¿Puede haber más vitalidad en intentar suicidarse arrancándose a mordiscos la propia lengua? Si alguien tiene la tentación de rendirse le recomiendo que se alquile una película de Eastwood. Sentirá que la vida le puede dar otra oportunidad...

martes, 2 de abril de 2013

"Todo lo que era sólido”, de Antonio Muñoz Molina

Desde que leí “La noche de los tiempos” soy un ferviente admirador de Antonio Muñoz Molina. Ahora que tengo twitter me he hecho seguidor suyo y disfruto de sus breves apuntes cotidianos. Hace pocos días, paseando por Bilbao, entré en El Corte Inglés y me hice con su último libro, un ensayo titulado “Todo lo que era sólido” en el que hay reflexiones muy atinadas respecto a las causas que nos han llevado a la situación de crisis que padecemos. También hay en el libro anécdotas reveladoras, sobre todo aquellas en las que deja en cueros a algún político importante de los últimos tiempos. No me resisto a contarles una de Zapatero. Sucedió en una visita al palacio de la Moncloa de tres o cuatro directores de centros del Instituto Cervantes entre los que se encontraba Muñoz Molina. Zetapé les enseñó el palacio y cuando llegó a la sala de reuniones del Consejo de Ministros apoyó las manos en el sillón de presidencia y dijo: “Éste es el sitio más especial del palacio. Cuando te sientas aquí es cuando tocas de verdad el poder” (pág. 31). No sé qué impresión les causará, pero detrás de esa frase yo veo un niño engolosinado con el poder. Me deja aturdido que alguien que desempeña tal cargo no destaque en primer lugar la responsabilidad que entraña, la dificultad y la soledad que acompañan el momento de tener que tomar decisiones que afectan a tanta gente. Es verdaderamente increíble que no se le ocurriera otra cosa que subrayar la sensación de ser poderoso. Revela bien a las claras en manos de quién hemos estado.

lunes, 1 de abril de 2013

Este Federico...

A media mañana me he tomado un café mientras escuchaba el programa "La mañana", de Federico Jiménez Losantos. A esa hora hablaban de temas de prensa rosa o crónica social. Federico tiene un sentido del humor fino, y hay veces que lo borda, como hoy. Lo curioso es que la gracia no era tal, o al menos no se lo ha parecido a los contertulios del programa que ni han soltado no ya una carcajada, sino ni siquiera una tímida risilla cómplice. Debe de ser porque para entender el comentario federiquil hay que saber algo de toros. Al grano. La cosa iba de toreros y en esto Federico empieza a hablar de las múltiples reapariciones del maestro Antoñete y suelta que en la última ya se quedaba quieto, pero porque el hombre no podía moverse... ¡Qué cabronazo, ja, ja! Madre mía, me hacía falta reirme a gusto y le doy las gracias. ¿No estarán esperando que se la explique? Ya les dije que había que saber algo de toros...

sábado, 30 de marzo de 2013

"Sobre el imperio romano" y la necesidad de repensar la democracia

En "Sobre el imperio romano" Ortega realizó una distinción entre "vida como libertad" y "vida como adaptación" que me parece utilísima para tratar de entender la actual situación política española y la de otros países europeos con relación a la Unión Europea. A partir de las reflexiones de Ortega se puede decir, en primer lugar, que hay que romper con la idea de que la libertad política está ligada necesariamente a la democracia. Las instituciones de la Roma republicana, como observaba Cicerón y nos recuerda Ortega, hiceron posible entre los romanos siglos de vida pública en libertad. En segundo lugar, la democracia no siempre garantiza la libertad, como cada vez es más evidente. En un sistema democrático puede producirse esa situación de "vida como adaptación" que básicamente supone la imposibilidad de decidir libremente el camino que deseamos emprender colectivamente como comunidad política. En lugar de decidir hay que adaptarse a unos acontecimientos que nos vienen dados. Es como si Ortega estuviera viendo el momento actual en el que los gobiernos de muchos países europeos nos dicen que no hay alternativa a sus políticas. En su día dijo Rajoy en el parlamento -está comentado en el blog- que los españoles no podemos elegir. Me pareció una de las afirmaciones más graves que se han hecho en los últimos tiempos. Si esta situación que nos pide adaptarnos a lo inexorable se prolonga, poco a poco -ya está sucediendo- comenzarán a abrirse paso ideas políticas que reclamen el regreso de ese clima de libertad política con el que comenzó nuestra democracia en los años de la Transición y que se ha apagado curiosamente en el momento de mayor integración política europea. Esto es lo que está pasando, lo que los grandes partidos se resisten a admitir: la gente quiere cambios profundos en la política. No basta con cambios de gobierno, hace falta repensar la democracia. Las formaciones que sepan ver esta realidad y busquen la manera adecuada de darle respuesta lograrán tener la iniciativa política.

jueves, 28 de marzo de 2013

"Grandes esperanzas", la película

Esta noche he ido a ver "Grandes esperanzas", película basada en la novela de Dickens del mismo nombre a la que me referí en el blog hace unos meses. Tenía curiosidad por ver cómo se las habría ingeniado el director para adaptarla al cine. En su día comenté que no me convenció la forma de narrar de Dickens. La novela carece de agilidad, pese a que es una historia apasionante y hay personajes muy logrados, como Joe Gargery o el abogado Jeager.  De los cuatro gatos que había en el cine debo de haber sido el único que ha salido satisfecho. Mis vecinos de arriba han amagado un par de veces con levantarse y marcharse al más puro estilo Paco Umbral, y la parejita de delante tampoco parecía muy entretenida. Creo que haber leído el libro en este caso les hubiera ayudado porque, al igual que sucede en la novela, la historia empieza a "verse" bien avanzada la narración. La película es una adaptación bastante fiel, aunque hay pasajes, alguno importante, omitidos. Salvo Ralph Fiennes, las interpretaciones no me han llamado la atención. En cambio, me ha sorprendido muy agradablemente lo bien reflejados que están el paisaje de los marjales y el ambiente de Londres. También merece destacarse el vestuario. No me atrevo a aconsejársela. Temo que acaben como mis vecinos de butaca, pero a mí me ha parecido una buena película.

martes, 26 de marzo de 2013

A favor de la acampada libre

Me gusta mucho la montaña, especialmente los pirineos. Sólo he estado allí una vez. Pasé dos semanas con el Centro Excursionista de Valencia en la zona de Benasque –pirineo aragonés- cuando tenía unos once años. La experiencia sigue grabada en mi memoria. Bebíamos directamente agua del río Esera, aprendíamos habilidades típicas de “boy scouts” y realizamos varias ascensiones a picos que superaban los 3.000 metros. Durante esas ascensiones en ocasiones acampábamos en parajes que hallábamos a gran altura, en las inmediaciones de lagos y rodeados de vacas.

Todavía no he tenido oportunidad de repetir la experiencia. Si pudiera elegir cómo regresar a los pirineos siempre me ha atraído la tienda de campaña, aunque quizá tenga una visión excesivamente romántica. Supongo que saben que la acampada libre está prohibida en toda Europa salvo en Noruega. Me parece una restricción innecesaria a la libertad de circulación. ¿Por qué no podemos plantar una tienda de campaña y pasar una noche en una montaña de titularidad pública? El argumento de prevenir riesgos para el medioambiente es ridículo, pues aunque no se acampe la gente sin sensibilidad lo puede dejar todo perdido y provocar un incendio. Quizá se pretenda proteger el negocio de los campings, pero sacrificar la libertad por ello me parece un precio demasiado elevado. No sé a ustedes, pero a mí me resulta muy desagradable pensar que ni siquiera puedes dormir en pleno monte sin pagar cuando un animal sí puede hacerlo.  

domingo, 24 de marzo de 2013

El papa Francisco

Supongo que todos nos llevamos una sorpresa con el nuevo papa. Bergoglio, el jesuita argentino, no aparecía en ninguna de las informaciones publicadas por la prensa. Ya veremos el camino que toma su pontificado, pero tengo la impresión de que ha sido una elección acertada. Sus primeros gestos y palabras se han centrado en los pobres, y eso me ha gustado mucho. También me parece una buena noticia que sea un papa hispanoamericano, argentino en este caso, no tanto porque hable español como porque reafirma el carácter universal de la Iglesia católica. Pero quizá el rasgo más destacable del papa Francisco sea su condición de jesuita. No conozco bien los principios orientadores de esta orden religiosa ni tampoco su manera de funcionar más allá de su vocación misionera y educativa. He leído obras de varios jesuitas, algunas de ellas poco ortodoxas e incluso incompatibles con la doctrina de la Iglesia en algún punto como las de Anthony de Mello, por lo demás brillantes y lucidísimas. Es curioso comprobar las diversas maneras de entender el cristianismo que están presentes en esas obras, y esto me hace pensar que entre ellos debe de reinar un clima de profundo respeto por la libertad de expresión forjada en una conciencia libre. La acentuada personalidad de los jesuitas me hace presagiar que Francisco va a introducir cambios importantes. Ya veremos si es así y en qué consisten.

sábado, 23 de marzo de 2013

El marasmo valenciano

Hoy, paseando con mis padres por el centro de Valencia, he vuelto a tener la sensación de que la ciudad ha perdido el vigor de hace una década, cuando vivíamos creyendo que éramos ricos y en realidad nos gastábamos un dinero prestado que ahora debemos devolver. No es la primera vez que me sucede en los últimos años. Marasmo es la palabra que mejor sintetiza el cúmulo de sensaciones que me asaltan cuando paseo por la ciudad. Sí, el marasmo que provoca una crisis que es más intensa aquí que en el resto de España e incluso que en otras ciudades de la Comunidad Valenciana. Percibo más vitalidad en Elche –la ciudad en que resido- que en Valencia, probablemente debido a la ilusión y el buen hacer del nuevo equipo municipal del PP, que lo está haciendo realmente bien, incluso en estos tiempos de austeridad.

De ello hablaba con mi padre. Y comentábamos además la situación de asfixia financiera de la Comunidad Valenciana. Creo que el PP tiene pocas opciones de volver a obtener mayoría suficiente para gobernar. Ahora mismo lo más probable es que vayamos a un tripartito cuya forja quizá concluya con Mónica Oltra, posible candidata de Compromís, en la presidencia de la Generalitat. Tiempo habrá para hablar de ello, pero lo que no acabo de entender es la estrategia del PP tanto a nivel autónomico como nacional con relación a la Comunidad Valenciana. Estoy convencido de que los dirigentes regionales del PP estarán intentando hacer ver a la dirección nacional que con este sistema de financiación, absolutamente injusto para Valencia, bastante más que para Cataluña, los valencianos van a terminar por estallar y no votarles. De vez en cuando se lee en los periódicos alguna declaración de dirigentes en ese sentido, pero el nivel de protesta es todavía muy moderado. Supongo que no pueden elevar el tono y ello les está lastrando. Pero da la impresión que a los dirigentes nacionales del PP les importa poco perder el gobierno de la Comunidad Valenciana, pues sería lógico compensar la discriminación financiera que sufre la Comunidad Valenciana con un trato más beneficioso en los presupuestos generales del Estado. Nada de eso sucede.

En estas circunstancias, al igual que en su día veía claro que la política de Zapatero estaba dejando espacio político para un partido nacional de izquierda (que aprovechó UPyD), en la Comunidad Valenciana un partido político regionalista de centro derecha que aspirara a ocupar el hueco que en su día dejo Unión Valenciana, y que hiciera de la reivindicación de un trato justo con relación al resto de regiones españolas y de la regeneración de la política valenciana sus señas de identidad, podría tener bastante éxito. El problema es que no parece haber personas dentro del valencianismo de derechas capaces de dar ese paso al frente, políticos de nuevo cuño y sin pasado poco edificante que consideren urgente que Valencia ponga fin a este marasmo (por lo menos el político) en el que está sumida. Mientras tanto, en la política valenciana el PPCV juega a la defensiva y la iniciativa la lleva Compromís, cuyos dirigentes están logrando conectar con el descontento de muchísimos valencianos. ¿El PSPV? De momento ni está ni se le espera. 

P.D. Escrito este post, leo unas declaraciones de Alfonso Rus criticando a Rajoy y reivindicando con claridad una financiación justa para Valencia. ¡Bien!

martes, 19 de marzo de 2013

Chipre puede ser el primer Estado en salir del euro

La solución que se había pensado para rescatar a los bancos chipriotas, que en este caso dado su tamaño es lo mismo que rescatar al país, era bien sencilla: los bancos de aquel país se han expuesto demasiado al ofrecer jugosas rentabilidades con productos de alto riesgo que han estallado (como deuda soberana griega); por tanto, que asuman parte del coste del rescate todos aquellos que han confiado en esos bancos depositando ahí su dinero. Se trata, piensa la troika, de la solución más racional, de la menos mala, ya que el resto de los europeos no pueden ser los únicos paganini del festín que se han dado los que sucumbieron a la tentación del dinero fácil de la banca chipriota. El primer problema es que con las quitas a los depósitos y el consiguiente corralito para hacerla efectiva puedes provocar que cunda el pánico en otros países al generarse un precedente -ahora parece ser que la UE pretende rectificar recomendando a Chipre que no se vean afectados los depósitos de menos de 100.000 euros-. El segundo problema es que con esa quita pagan justos y pecadores, pues no solo afecta a los muchos rusos que han hallado en Chipre el maná, sino a ciudadanos chipriotas que tenían el dinero en el banco como cualquiera de nosotros, y eso es lo que les deja estupecfactos e indignados. ¿Cargamos, pues, con el coste total del rescate a Chipre? Al margen de otras consideraciones, me parece que esa era la única solución realista si se quería mandar a los mercados el consabido mensaje de que el euro es irreversible. No se ha hecho así y ahora el parlamento chipriota no acepta los términos del rescate, deciden ser irracionales y demostrar a los que no se han enterado que los Estados siguen siendo soberanos, aunque sólo sea para hundirse soberana y libremente. Esto es lo que no parecen entender los alemanes: la gente puede rechazar lo racional cuando les resulta ininteligible. Y ante ese rechazo, que deberían haber previsto, la UE sólo puede recular o ver que la unión monetaria se rompe, que es probablemente lo que va a suceder con Chipre si el presidente chipriota no logra que el parlamento rectifique y acepte el acuerdo. Mal asunto.

lunes, 11 de marzo de 2013

"Lincoln"

Ayer fui a ver "Lincoln", una buena película en la que destaca la sensacional interpretación de Daniel Day-Lewis, premiada con un oscar. Siempre prefiero ver las películas en versión original, pero en este caso me parece imprescindible, sobre todo después de haber leído el esfuerzo que realizó Day-Lewis por lograr el tono de voz característico de Lincoln. Además, los debates que tienen lugar en el Congreso suenan hasta ridículos doblados en español. Pero no había que esperar al DVD. Estas películas hay que verlas en el cine, sólo allí se pueden apreciar bien algunos detalles como, por ejemplo, la utilización que hace Spielberg de las luces y las sombras en las estancias interiores. Las escenas en la casa blanca se desarrollan en una penumbra densa que contribuye a resaltar la gravedad del ambiente y la soledad del presidente. También merece la pena destacar que la película en ocasiones parece una obra de teatro que permite apreciar mejor el trabajo de interpretación de Day-Lewis. 

Es una película sobre Lincoln, aunque no biográfica. En lugar de recrear buena parte de su vida, Spielberg se centra en los acontecimientos que tuvieron lugar en enero de 1865. Durante ese mes Lincoln maniobró intensamente para sacar adelante la decimotercera enmienda a la Constitución, aquella que abolió la esclavitud. Me parece una elección acertada, porque en ese pasaje de su vida quedan reflejados los rasgos más característicos de este gran político: serenidad, firmeza, elocuencia, cercanía, perseverancia y sagacidad. Aunque Lincoln es popularmente conocido por haber abolido la esclavitud y por su protagonismo durante la guerra de secesión americana, su figura va mucho más allá de estos acontecimientos. Mi fascinación por él también se debe a haber leído los libros de Dale Carnagie, quien solía citar con frecuencia pasajes de la vida de Lincoln para ilustrar sus explicaciones, sobre todo aquellas que tienen relación con la oratoria. 

Empecé la película cuando todavía lucía el sol y salí de noche, como en esas largas sesiones de cine de las que disfrutaba cuando era pequeño. Dos horas y media asombrado por Day-Lewis.

miércoles, 6 de marzo de 2013

¿Al final de la crisis?

Estaba esperando a conocer las cifras del déficit público de España en 2012 para analizar la situación económica. Ya disponemos del dato y éste ha supuesto una enorme satisfacción para el Gobierno y para la Comisión Europea. Se daba por descontado que España superaría el 7% de déficit público –sin contar el rescate bancario-, así que el 6,74% es un éxito que ha servido para que Rajoy, sin triunfalismos, sostuviera en el debate sobre el Estado de la Nación que se han sentado las bases de la recuperación. Además del control del déficit, el Gobierno funda sus esperanzas en el superávit de la balanza por cuenta corriente, en el saneamiento del sector bancario, en la reforma laboral, y en la mejora de la competitividad provocada por el proceso de devaluación interna de los salarios en el sector público y privado. Con todo ello se podría decir, en opinión del Gobierno y de bastantes expertos, que seguimos inmersos en la crisis, pero podemos empezar a ver el final del túnel. ¿Es eso cierto?

De todos los análisis que he leído estoy de acuerdo con Jordi Sevilla en que de momento estamos cambiando déficit por deuda. En efecto, rebajar el déficit más de dos puntos con una recesión del 1,4% del PIB es, como bien dice Alberto Recarte, espectacular. Este esfuerzo nos permite alejar el fantasma del rescate y rebajar la prima de riesgo. Ahora bien, que uno se sacrifique no significa que va a pagar. Seguimos teniendo déficit y, por tanto, nuestra deuda pública sigue aumentando, afortunadamente, pues ello significa que nos siguen prestando y por eso dice Sevilla que cambiamos déficit por deuda. La salud de nuestra economía ha mejorado con la disminución del déficit y el equilibrio en la balanza por cuenta corriente, pero el verdadero reto es empezar a empezar a crecer, y por eso se habla tanto de presionar a Merkel para impulsar políticas de crecimiento. Ahora se trata de remontar, de crear riqueza que haga crecer la economía, reducir el desempleo, sanear mucho más las cuentas públicas y recuperar cierto grado de bienestar. Mientras no crezcamos seguiremos cambiando déficit por deuda, algo que no puede ser así indefinidamente.

¿Y hay motivos para pensar que vamos a crecer? Es cierto que se han adoptado medidas encaminadas a lograr dicho objetivo, tales como la reforma del sector financiero y la laboral, que se han presentado como los dos grandes pilares para una nueva etapa de crecimiento. Respecto a la primera, resulta fundamental, aunque como ciudadano me parezca escandaloso que haya que haber llegado a este punto por la nefasta e inmoral gestión de muchos banqueros. De la segunda ya dije en su día que, aunque tenía aspectos positivos, era un instrumento para despedir más fácil y barato. Creo que ha beneficiado a muchos empresarios (algunos con escasos escrúpulos), y ahora empieza a verse su coste social. Rajoy ha anunciado nuevas medidas para favorecer el crecimiento, como, por ejemplo, la ley de la unidad de mercado y una importante línea de crédito para emprendedores. ¿Es suficiente?

Creo que la situación debe estabilizarse y mejorar por la propia dinámica interna de todo proceso de ajuste, pero hay tres dificultades que no veo fácil superar. En primer lugar, los logros obtenidos en la reducción del déficit se han basado en buena medida en importantes subidas de impuestos y en bajadas de sueldo a empleados públicos. Esto unido a la subida de la energía (luz, gas, gasolinas, etc.) ha hecho que el consumo se desplome (lo cual justifica en buena medida la mejora de la balanza de pagos por cuenta corriente) y no veo que tenga visos de cambiar a medio plazo. En segundo lugar, nuestro crecimiento ya no va a recibir el impulso de la construcción, sino que tiene que basarse, además de en el turismo, en potenciar actividades económicas que primen la calidad, lo cual exige una apuesta por la formación y el I+D. ¿Va a ser posible recolocar a muchos parados de escasa cualificación? Lo veo bastante difícil. Algunos de los más cualificados han optado por marcharse y otros esperan su oportunidad o se lanzan a emprender (nuestra gran esperanza), pero sustituir el motor de la construcción es una tarea larga y difícil, aunque imprescindible. En tercer y último lugar, sigo viendo el envejecimiento de la población como un problema al que urge dar respuesta. En poco tiempo van a aumentar notablemente las clases pasivas y las cuentas de la Seguridad Social generarán déficits cada vez más inasumibles. Aquí hacen falta cambios muy importantes, comenzando por políticas que favorezcan la familia y la natalidad, pero esto es muy complicado por muchas razones (recomiendo la lectura de mis posts sobre la soltería y la natalidad).

En definitiva, estoy contento porque es verdad que se ha evitado el desastre, pero creo que nos queda todavía un buen trecho para salir de esta crisis. ¿Significa esto que la política de austeridad era la correcta? La austeridad era necesaria en aquellas políticas que se han llevado a cabo con manifiesto despilfarro e incompetencia, pero jamás en educación y sanidad. Todo hubiera sido más sencillo, y se hubieran obtenido mejores resultados, si el Banco Central Europeo hubiera respaldado a España comprando bonos, en lugar de mirar demasiado tiempo hacia otro lado mientras se centraba casi exclusivamente en el control de la inflación. Hemos y estamos sufriendo más de lo necesario, y los culpables del sufrimiento –todos identificables- han gozado de absoluta impunidad. Pero dicho esto, formando parte de la unión monetaria España no disponía de excesivo margen para otras políticas, aunque siempre queda el recurso de romper la baraja si se te imponen condiciones inaceptables (y ha habido momentos en que se imponía la ruptura, menos mal que Draghi rectificó), de ahí que muchas de mis críticas se hayan dirigido contra Merkel y la política que ha impulsado. Y voy a concluir reiterando una idea de la que estoy plenamente convencido: el euro es un error, aunque se supere esta crisis. Y deberíamos darnos cuenta de que dar marcha atrás no significa acabar con la Unión Europea, tal como muchos parecen querer hacernos creer con esa insistencia en proclamar que el euro es un proyecto “irreversible”. El objetivo de España debería ser superar esta crisis logrando sanear sus cuentas públicas y abandonar este club en el otros tomarán las decisiones en función de sus intereses. Confío en España, cada vez veo más virtudes nacionales que antes me pasaban desapercibidas, y creo que haríamos bien en recuperar las riendas de nuestra política monetaria, demasiado importante como para dejarla en manos de Bruselas.

sábado, 23 de febrero de 2013

¿Por qué irrita UPyD?

Desde que empezó la legislatura, Rajoy se ha mostrado beligerante y desdeñoso con Rosa Díez, quien con sus intervenciones parece haberse convertido en la principal representante de la oposición. En el reciente debate sobre el Estado de la Nación a Rajoy le dio por confundir -creo que voluntariamente- el apellido de Rosa Díez, y alternaba "Díaz" y "Díez" con muy mala sombra. Rosa zanjó el tema sin tonterías y le recordó que si apelaba a llamar a las cosas por su nombre empezara por su apellido. 

La pasada semana UPyD también protagonizó una polémica a propósito de la consideración de los toros como bien de interés cultural, si no estoy mal informado. Toni Cantó tuvo una notable intervención en el Congreso que, como suele suceder en estos tiempos, fue simplificada y tergiversada. Molestó especialmente que Cantó dijera algo tan elemental como que los animales no tienen derechos "sensu stricto" (esto fue con lo que la gran mayoría se quedó, interpretado como una invitación a herirlos impunemente), aunque oportunamente precisó que ello no justifica el maltrato animal, y mucho menos la brutalidad. Le llovieron toda suerte de críticas e improperios en twitter (ahora que tengo cuenta me entero de lo que se cuece ahí). 

Tengo la sensación de que UPyD es una formación que irrita a sus adversarios políticos, tanto si son de derecha como de izquierdas. Rajoy parece sentirse más cómodo y respetar más a Durán i Lleida que a Rosa Díez, y entre las izquierdas molestan especialmente las propuestas de UPyD, que se desdibujan como rancio españolismo centralista. 

A mi juicio, la razón de esta especial inquina contra UPyD se debe a que este partido rompe con lo que podríamos llamar los "packs" ideológicos tradicionales. En España parece que si uno es votante del PP eso incluye defender la monarquía y la bandera rojigualda. Alguien que vote al PSOE no acudirá a un mitin provisto de la bandera española, y la defensa de la nación española no formará parte de sus prioridades, no sea que puedan tacharlo de conservador y carca. No se puede ser de Izquierda Unida sin acudir a una manifestación sin la bandera republicana reclamando la III República. Más cerca, alguien que se considere seguidor de Compromís apostará por las políticas de inmersión lingüística y se referirá a Valencia como País Valencià. UPyD ha descolocado a sus adversarios con dos novedades importantes: por un lado pretende -y quizá lo esté consiguiendo- dar por superada la división izquierda-derecha. Los del PP recuerdan el pasado socialista y progre de Rosa Díez para devolver al redil a sus ovejas descarriadas, y entre los partidos de izquierda se presenta a UPyD como un partido que en algunos de sus planteamientos podría catalogarse de extrema derecha. Por otro lado, UPyD aspira a reforzar la cohesión de la nación española como garantía para asegurar la igualdad de derechos entre todos los españoles, algo que ha temido hacer el PSOE, como demuestró la llegada de Zapatero a la Secretaría General imponiéndose al "españolista" Pepe Bono. En resumen, un partido difícilmente clasificable y cuyo discurso no es fácil de criticar esgrimiendo los clichés habituales. Por cierto, a mí esto de romper con los "packs" ideológicos me parece de lo más saludable.

miércoles, 20 de febrero de 2013

El Registro Civil de Elche, un auténtico muro para los ciudadanos

Vivimos una época de grave deterioro de los servicios públicos y actuar con responsabilidad ciudadana exige protestar, reclamar y hacer lo posible por dar a conocer nuestro caso para dejar constancia de qué está pasando y tratar de ayudar a otras personas. Les voy a contar mi experiencia con un trámite en el Registro Civil de Elche.

La falta de medios con que cuenta la administración de justicia en Elche es un auténtico escándalo que cualquier día terminará por estallar. En concreto, el colapso del Registro Civil de Elche ya había sido noticia en el diario Información, pero vayamos por partes. La historia comienza con la necesidad de un certificado literal de nacimiento para tramitar el DNI de mi hija. El Ministerio de Justicia incluye en su página web la posibilidad de tramitar dicho documento “on line” (http://www.mjusticia.gob.es/cs/Satellite/es/1215197356695/60-40.html)  y recibirlo por correo en tu domicilio sin ningún coste en un plazo aproximado de un mes. Además, incluyen un teléfono de pago 902 para consultar el estado de la tramitación. Pues bien, el pasado 9 de enero realicé el trámite y recibí un email del ministerio en el que me confirmaban el número de entrada al Registro de mi solicitud, la clave de identificación y la fecha de presentación. Después de casi un mes y medio sin recibir el certificado, telefoneé al 902 del ministerio y la respuesta fue que ellos sólo ofrecían la página web para realizar el trámite, pero la información sobre la tramitación debía dármela el Registro Civil de Elche, que son los encargados de mandármela a mi domicilio. Amablemente me proporcionó el teléfono de contacto. Existen tres números de teléfono para contactar con el Registro Civil de Elche, el que me facilitó el ministerio y otros dos más, incluido un 902. He aquí los teléfonos: 966917037     969963194    902013900. Los dos segundos se facilitan para obtener “cita previa”. Como comprobarán si se toman la molestia de intentarlo, los primeros ni siquiera les darán tono. Y les aconsejo no llamar al 902 porque gastarán el dinero en balde y les dirán que telefoneen en otro momento.

¿Cómo saber sin desplazarme el estado de mi trámite? Imposible. Es necesario personarse en el Registro Civil, y para que te atiendan ahora es necesario solicitar “cita previa”, que ha sido el sistema que ha servido para evitar las colas bochornosas que reflejaba la prensa. Como los teléfonos no funcionan, la única manera de pedir esa cita es a través de internet. Allá voy. No hay citas libres en febrero y la primera libre aparece a mitad de marzo (que no está mal según he averiguado más tarde, pues lo habitual eran demoras de meses). De todas formas, si les urge salir del país con su niño ya saben que por las buenas no hay forma: la administración les exige unos documentos que en el caso de Elche son incapaces de proporcionar diligentemente.

Como me urge obtener el DNI decidí presentarme esta mañana sin cita previa en el Registro Civil con una hora de adelanto a la apertura de la Ciudad de la Justicia con el fin de ser de los primeros en decirles que llevo más de un mes esperando el documento que tramité a través de internet. Los datos de ese documento eran mi “salvavidas”, pues sabía que si no aportaba nada me dirían que volviera cuando hubiera concertado una cita, que es lo que he visto hacer con una rumana desesperada por no sé qué papel y que obtuvo un expeditivo “vuelva mañana” (cosa que no entendí porque mañana le será imposible obtener cita, y el pasado, y el siguiente, y quizá nunca si esa mujer no sabe que existe internet).

Fui el primero de la fila, le expliqué el caso a la funcionaria y le enseñé el papel con los datos de mi solicitud. Afortunadamente me dijo que esperara y que cuando tuviera un hueco me lo daría, pero que NO TRAMITAN NADA DE LO QUE SE SOLICITA POR INTERNET. Es decir, que podía esperar eternamente, es decir, que el Ministerio de Justicia, no sé si ignorante de la situación del Registro Civil de Elche, está tomando el pelo a los ciudadanos.  Un verdadero escándalo, especialmente sangrante porque te hacen gastar inútilmente dinero llamando a un 902. Previendo lo que podía suceder me llevé trabajo al Registro y después de una hora tenía el dichoso certificado.

He aquí mi testimonio. No culpo a los funcionarios del Registro Civil de Elche, que seguramente no cuentan con personal suficiente. Simplemente dejo constancia del caso que, por lo que se escucha en la calle, es un ejemplo más del deterioro del funcionamiento de muchos servicios públicos, especialmente en determinadas comunidades autónomas y, en concreto, en ciudades grandes que como Elche no son capitales de provincia y tienen mucha población.